TOMATE FRITO y cómo conservarlo

tomate frito
El tomate frito con huevos y patatas fritas era la cena que con mayor frecuencia nos preparaba mi madre cuando éramos pequeñas. Nunca nos cansábamos de esta cena y se la pedíamos constantemente.

Aún hoy, con un repertorio gastronómico mucho más amplio, sigue siendo para mí un plato de los de “toma pan y moja” tanto en sentido literal como figurado. Claro que ahora, las necesidades calóricas no son las mismas y hay que cenar cosas más ligeras y reservar este plato para días especiales.

Aparte de con los huevos fritos, el tomate frito hace buena pareja con casi todo lo que uno desee así que no es mala idea, sobre todo si se tiene un pequeño huerto como es mi caso y la cosecha es abundante como este año, preparar en conserva unos cuantos tarros para ir consumiendo tomate casero y rico a lo largo del año.

TOMATE FRITO PARA CONSERVAR

INGREDIENTES

Para 3 kilos de tomates – ½ vasito de aceite de oliva – 6 dientes de ajo – 1 cucharadita de azúcar – sal.

Si lo guardamos en tarros, necesitaremos además: aceite de oliva crudo y unos granos de pimienta negra.

ELABORACIÓN

Lavamos los tomates y los escaldamos (introducir en agua hirviendo durante unos momentos) para pelarlos con facilidad.

Una vez pelados, los partimos a la mitad y las mitades, en rodajas más bien finas.

rebanado del tomate para tomate frito
Pelamos los dientes de ajo y los fileteamos.

Ponemos el aceite en una cacerola o rustidera amplia al fuego y agregamos los ajos.
Cuando empiezan a chisporretear pero sin dorarse, añadimos el tomate y dejamos que cueza a fuego medio durante unos 40 o 50 minutos.

Hay zonas en las que se tiene la costumbre de dejarlo cocer durante muchísimo tiempo, hasta que el tomate queda casi seco y de un color oscuro.
Yo no discuto que esté más o menos rico. Lo que sí es cierto es que con una cocción tan prolongada pierde todas sus propiedades y adquiere un sabor, para mi gusto, demasiado concentrado.

Poco antes de retirarlo del fuego lo sazonamos con la sal y el azúcar.

MODO DE CONSERVARLO

Esterilizamos unos tarros de cristal con tapa hermética.
Los colocamos (también las tapas) sobre trapos en una cacerola. Los cubrimos con agua fría y los llevamos al fuego. Dejamos que hiervan durante unos 10 minutos.

Rellenamos los tarros con el tomate dejando libres un par de centímetros.

Cubrimos el tomate con una capa de un centímetro de aceite cruda,dejamos el otro centímetro libre y añadimos unos granos de pimienta, que es conservante.

rellenado del tarro con aceite y pimienta
Tapamos bien los tarros, los ponemos de nuevo en una cacerola con los trapos, los cubrimos con agua y los cocemos al baño maría durante aproximadamente una hora. Si los tarros son grandes, se cuecen algo más. Se dejan enfriar dentro del mismo agua de cocción.


Una vez los tarros fríos, los secamos, los etiquetamos poniendo la fecha y los guardamos en un lugar fresco, seco y oscuro.

tomate frito en conserva

Comentarios

Alisonhouse ha dicho que…
Qué suerte tener un huerto propio. Echo de menoss esos tomates. Me encanta la salsa de tomate casera y es cierto que se utiliza para todo. besos
La cocina de Camilni ha dicho que…
Hija mía qué bien tener un huerto.

Los tomates fritos, siempre tengo congelados me encanta de tipo casero.

Muy bien explicado, te han quedado con una pinta riquísima
Lidia ha dicho que…
Alison: es verdad que es una suerte tener tomates caseros. La pena es que frescos solo duran un par de meses, pero confitados o fritos o en salsa también están muy bien.

Camilni: gracias por tu comentario.
Yo también congelo mucho pero cuando el congelador dice "basta" lo hago al baño maría sin ningún problema.

Besos para las dos
Lidia De La O ha dicho que…
Lidia, yo nunca he preparado el tomate frito en conserva, no encuentro tomates tan buenos para ellos, en el huerto de mi suegro no salen buenos tomates, siempre cogen alguna plaga (es lo único que no sale bien en su huerto), y los comprados no tienen el mismo sabor. Aunque en cuanto consiga unos buenos tomates o por lo menos lo parezca los voy a probar a conservar, me encanta la idea de tomar mi propio tomate frito durante todo el año. Un beso.
miren ha dicho que…
Me ha encantado leer esta entrada, conservo salsa de tomate en tarros y congelada, para todo el año, gracias a la huerta de nuestro padre y lo de la pimienta es nuevo para mí, desde luego lo probaré.
Esa salsita te ha quedado de un color perfecto, tienes razón que demasiada cocción la vuelve oscura, hay que cogerle el punto.
Yo lo que sí le pongo es montones de cebolla.
Besos, buen día.
Lidia ha dicho que…
Lidia: a mí me gusta tanto el casero que lo hacía también cuando no tenía huerto. Aunque los tomates no sean muy allá, queda más rico y sano, para mi gusto, que el comprado.

Miren: me hace mucha ilusión tu comentario, precisamente viniendo de una persona como tú, que haces tantas maravillas con los productos de la huerta.
Yo, según para que cosas, también hago salsa con cebolla pero los sabores e incluso las texturas, son totalmente diferentes.

Besos y feliz fin de semana para las dos
Marta ha dicho que…
Me encanta el método para conservarla. ¡Gracias y enhorabuena!
mayca ha dicho que…
A mi también me gusta hacer conserva de tomate casero y ya hace muchos añosal menos unos 15, que los esterilizo en el lavavajillas, se reían y ríen de mí cuando lo digo, pero veo que no soy la única, ya dice que la cabeza es para pensar y se ve que las dos pensamos lo mismo¿ "que mejor forma de esterizarlos que con el lavavajillas"? y conte, que cuando empecé a hacerlo aún no tenía internet, me gusta tu blog, un abrazo
Lidia ha dicho que…
Muchas gracias Mayca, me alegro de que pensemos igual. Yo creo que en cocina muchas veces actuamos por inercia sin darnos cuenta de que los tiempos cambian y con ellos las posibilidades y todo lo demás. Cuando no había lavavajillas era imposible hacerlo así pero ahora, ¿qué sentido tiene no aprovecharlo? Un beso y hasta cuando quieras.
Anónimo ha dicho que…
lo intentare segun los tips