Patatas risoladas

 

Esta forma de preparar las patatas fritas tiene la ventaja de poder tenerlas prácticamente hechas con antelación y darles solo el toque final, justo en el momento de ir a servirlas. 

Eso y que están deliciosas, hace que sean las patatas fritas que prácticamente siempre decido preparar.

El truco de las patatas risoladas consiste en estar muy blandas por dentro y muy doradas y crujientes por fuera lo que podemos conseguir como explicaré a continuación.

ELABORACIÓN

Podemos utilizar patatas pequeñas o grandes. 

Patatas risoladas
Si son pequeñas, las pelamos y freímos enteras, en abundante aceite a fuego muy bajo hasta que están blandas. Entonces, las sacamos con cuidado del aceite para un recipiente y cuando vayamos a servirlas,  calentamos el aceite a tope y las volvemos a introducir un poco para que se doren.

Si queremos un procedimiento más rápido, las cocemos en la olla enteras con su piel, en agua con un poco de sal y cuando están cocidas, las pelamos y las doramos en abundante aceite, dorándolas bien por todos los lados.

Si utilizamos patatas medianas o grandes, las pelamos, lavamos y secamos y las cortamos en trozos (ver foto de portada). Luego, las freímos a fuego lento en abundante aceite como queda ya explicado y les damos el toque final con el aceite bien caliente.

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