BUÑUELOS DE CALABACÍN

Para conseguir estos preciosos buñuelos, crujientes por fuera y suaves y tiernos por dentro, he puesto una sartén con abundante aceite de oliva a calentar y cuando empezaba a querer humear he vertido cucharaditas de masa sobre ella.
No hay que hacer más que estar pendientes de que no se doren en exceso, sacarlos para encima de una toallita de papel absorbente y comerlos calentitos (aunque fríos también están ricos) solos o acompañados de alguna salsa o crema.
¿Os imagináis una crema de porrusalda con estos buñuelitos flotando en ella?
BUÑUELOS DE CALABACÍN
INGREDIENTES
- 200g de calabacín cocido
- 100g de harina
- ½ cucharadita de levadura en polvo
- 1 huevo – unas ramitas de perejil
- 1 diente de ajo
- Sal, pimienta blanca molida y nuez moscada rallada
- Chorrito del agua de cocer los calabacines
- Aceite abundante para freírlos.
Salsa de tomate triturada con albahaca seca.
ELABORACIÓN
Lavamos, troceamos y cocemos en un poquito de agua el calabacín.
Una vez cocido, lo escurrimos bien y lo trituramos con la batidora. Lo reservamos.
Ponemos en un cuenco el huevo, la harina con la levadura y una pizca de sal, un chorrito de agua, nuez moscada rallada y pimienta blanca molida.
Añadimos el calabacín cocido y triturado, el ajo y el perejil picados muy finos.
Lo mezclamos todo muy bien de forma que nos quede una masa fina, ni muy ligera ni muy espesa.

Tapamos el recipiente y lo dejamos reposar al menos media hora a temperatura ambiente.
Una vez reposada la masa, ponemos en una sartén honda abundante aceite y la llevamos al fuego.
Cuando está bien caliente, vertemos sobre ella cucharaditas de la masa.
Los buñuelos se irán formando solos. Ellos solos también, se dan la vuelta y se doran por todas partes, pero nosotros les ayudaremos un poquito si no fuera así.
Los ponemos a escurrir sobre papel absorbente de cocina y los servimos acompañados de una salsa de tomate triturada con la batidora y aliñada con albahaca seca.
Comentarios
Seguro que están deliciosos.
bss
Patricia
Gracias por la rectillaaaa y muchos besinos.
Un abrazo.
Hoy día no se inventa nada y seguro que hay mil formas de hacerlos pero la verdad es que yo tampoco los conocía y se me ocurrió la idea por lo de la fiesta de Todos los Santos y sus buñuelos obligados. Quedan riquísimos, seguro que los de espinacas también, esos tampoco los conozco.
Besos para todas.
Genial, guapetona.
Besos.