BIZCOCHO CON FRUTAS (feijoas o guayabos u otras)

Los ingredientes de este bizcocho son los de un bizcocho básico con dos salvedades:

• Haber sustituido la mantequilla por aceite de oliva suave.
• Haberle añadido trozos de fruta.

Si no disponemos de feijoas o guayabos, podemos utilizar manzana, pera o melocotón y el resultado también será buenísimo.
Dejaréis impresionados con él a los amigos con los que lo compartáis. Ya lo veréis si os animáis a prepararlo.

La fruta, sea la que sea la elegida, se pela, se trocea, se espolvorea con azúcar y limón y se cuece en el microondas o en una cacerola durante un momento, lo justo para que ablande un poquito.

BIZCOCHO CON FEIJOAS U OTRAS FRUTAS

INGREDIENTES

(Para un molde de 20 x 16cm. Si gusta y se quiere hacer mayor, se doblan todas las cantidades).

250g de feijoas – 2 huevos enteros – 100g de azúcar – 130g de harina – medio sobre de levadura o impulsor químico tipo Royal – 50ml de aceite - medio limón

ELABORACIÓN

La fruta
Pelamos las feijoas y las partimos al medio longitudinalmente.
Las vamos poniendo en una cacerola (o recipiente para microondas, según lo que elijamos) y rociándolas con limón para que no se oxiden.

Las espolvoreamos con azúcar y las llevamos al fuego. Las cocemos lentamente durante unos 4 o 5 minutos, moviéndolas con cuidado de vez en cuando para que se cocinen todas por igual.

Las retiramos del fuego y dejamos que se templen.

El bizcocho

Precalentamos el horno durante unos 10 minutos a 180ºC

Ponemos en un cuenco el aceite y el azúcar y lo mezclamos.

Agregamos los huevos de uno en uno y batimos para conseguir una crema homogénea.

Añadimos al batido la harina previamente  tamizada junto con la levadura y lo mezclamos (ahora ya  no batimos).

Aceitamos un molde y cubrimos el fondo con papel de horno.

Volcamos la masa sobre el molde y distribuimos por encima las feijoas.

Lo cocemos en el horno precalentado a 180º durante unos 40´(eso en mi horno pero cada uno ha de seguir las indicaciones del suyo) o hasta que lo veamos dorado y hecho.

Pinchar con una aguja en el centro del pastel para comprobar si está cocido. La aguja ha de salir limpia.

Introducimos una espátula entre el molde y el pastel para separarlos y lo sacamos del molde.
Lo dejamos enfriar sobre una rejilla.